La decisión de quedarse o no en la Alcaldía de Colón por parte de Diógenes Galván, generó mucha expectativas en la comunidad colonense, lo que al final decidió aceptar el cargo como el nuevo burgomaestre a partir del 2 de julio.
Para Ernesto López, de 42 años de edad, es necesario que de ahora en adelante se logren inversiones de parte del gobierno central para cambiarle la cara a la ciudad de Colón.
“La inversión privada y pública son necesarias y esperamos que el nuevo gobierno haga estas mejoras que ayuden al colonense a explotar el turismo”, dijo.
Asimismo Fernando Hooker, de 34 años de edad, opinó que este poco de lotes que están en desuso deben llamar a los propietarios para que los limpien y empiecen a hacer nuevas estructuras como hoteles y locales comerciales, que le den empleo a la juventud colonense.
En tanto, Enriqueta Molinar, de 52 años de edad, señaló que por el momento se debe gestionar el pago de los funcionarios municipales que se mantienen en protestas en la vía pública.
Mientras Ruth Barraza, de 49 años de edad, indicó que se debe obligar a las grandes empresas como el ferrocarril, los puertos marítimos que reviertan sus beneficios que reciben de sus actividades comerciales en la comunidad, en la cual no se ven ningún tipo de mejoras.
En las redes sociales, el alcalde electo anunció que la decisión fue tomada en familia, ante el voto recibido para que se encargará de la entidad alcaldicia.
Dijo que la decisión fue continuar y para ello el 2 de julio acudirá a su toma de posesión.
